Fuente: Periódico «El Urbano» de Chacabuco
Leemos en el periódico mencionado:
«Con el compromiso de incinerar lo recolectado, se está desarrollando una campaña para evitar que las pilas alcalinas
sean arrojadas junto con otros residuos, para no contaminar el ambiente. Los artífices de esta campaña son los alumnos que el año pasado cursaron 2º A en la Escuela Secundaria Básica Nº10, coordinados por el profesor Esteban Golía.»
«El proyecto se gestó en el marco de la materia construcción de ciudadanía y comenzó como una manera de manejar los residuos para luego abordar el temas de las pilas, según contó Golía.»
«El grupo se contactó con el Ingeniero Damián Serrone, quien trabaja en Productos del Maíz, y conoce empresas que se encargan de eliminar residuos peligrosos.»
«De esta manera, se prometió incinerar las pilas recolectadas en hornos de alta complejidad de Buenos Aires, que contienen los gases. Posteriormente, las cenizas son confinadas en cofres.»
«El sistema convenció a Gastón Cieri, de la Cámara de Comercio, quien sumó a la entidad a la campaña. Otros comercios e instituciones como ATE también decidieron acompañar a los estudiantes, colocando en sus locales depósitos de pilas. Estos serán llevados al Colegio Nacional, desde donde serán retirados por la empresa que incinerará las pilas.»
«Un grupo de alumnos, llamados “Los guardianes del Medio Ambiente”, controlan durante las vacaciones los depósitos.
Cuando inicien las clases, la idea de Golía es que los chicos continúen con la actividad.»
Veremos como avisarle a esta gente lo controvertida que resulta la práctica de incinerar residuos peligrosos… (entre otras cosas, mercurio!)
Ya: ¿que hacemos con las pilas? 
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